Síntomas de las Enfermedades Periodontales: Cómo Detectarlos a Tiempo.

Gingivitis y periodontitis: Síntomas y señales clave para identificarlas.


<img expr:src='data:post.thumbnailUrl.replace("s72-c","s1600")'      expr:alt="'Signos iniciales de periodontopatías en encías y dientes.'"      style='width:100%; height:auto;'      loading="lazy" />
Imagen  de Periodontitis temprana.
Los síntomas iniciales de las enfermedades periodontales suelen ser sutiles y, en muchos casos, requieren la evaluación de un profesional para su detección. Sin embargo, hay señales tempranas que puedes identificar por ti mismo. A medida que la condición progresa, los síntomas se vuelven más evidentes y distintivos. En este artículo, te enseñaremos cómo reconocer tanto los síntomas tempranos como los más avanzados de las periodontopatías.

¿Cuál es la primera señal de tener periodontitis?

La primera manifestación de la periodontitis suele ser un leve sangrado en las encías, que progresa gradualmente hacia alteraciones más profundas. Es importante destacar que la gingivitis, aunque es un trastorno en sí misma, no siempre evoluciona hacia periodontitis, que es más grave y destructiva.

Aunque los especialistas suelen diferenciar entre gingivitis y periodontitis, en la práctica clínica ambos se consideran etapas de un mismo proceso.

Las enfermedades periodontales se dividen en dos categorías principales: gingivitis y periodontitis. La gingivitis es la forma reversible, que se limita a la inflamación de las encías sin afectar los tejidos de soporte, como el hueso o el ligamento dental. En cambio, la periodontitis es la forma avanzada, que implica la destrucción de los tejidos de soporte de los dientes, incluidos el hueso alveolar y el ligamento periodontal.

La periodontitis se define por la inflamación de las encías en áreas donde ha ocurrido una pérdida de inserción patológica de las fibras colágenas, que unen el cemento de las raíces dentales al hueso alveolar. En este proceso, el epitelio de unión migra hacia abajo, formando defectos óseos y creando las bolsas periodontales características de esta enfermedad.


<img expr:src='data:post.thumbnailUrl.replace("s72-c","s1600")'       expr:alt='"Imágenes clínicas de varios tipos de periodontitis, mostrando sus características y efectos en los tejidos."'       style='width:100%;height:auto;'       loading="lazy"/>
En las fotos se pueden observar cuatro manifestaciones de enfermedad periodontal, de diversa gravedad, comenzando por una gingivitis por placa bacteriana, seguida de periodontitis con destrucción del contorno y por último periodontitis muy avanzada que conduce a pérdida de todos los dientes
.

A continuación, se presentan los síntomas más comunes. Si experimenta uno o más de ellos, es recomendable consultar a un especialista en periodoncia, ya que es probable que padezca gingivitis o periodontitis. Si se detectan a tiempo, ambas condiciones pueden ser tratadas de manera efectiva, evitando complicaciones mayores, para ello usted puede realizar por si mismo un autoexamen.

Examen de las encía para la detección de periodontitis.

Puede realizar un autoexamen oral para detectar posibles signos de periodontopatía. Revise sus encías en busca de los síntomas que se mencionan a continuación. Si presenta uno o más de estos síntomas, generalmente varios aparecerán a la vez, lo que podría indicar que padece alguna forma de enfermedad periodontal. En ese caso, es fundamental consultar a su dentista lo antes posible. La intervención temprana no solo facilita el tratamiento, sino que también influye en la evolución y el pronóstico a mediano y largo plazo. Recuerde, no solo está en juego la salud de sus dientes, sino también su bienestar general, ya que las enfermedades periodontales pueden aumentar el riesgo de infartos, neumonías, disfunción eréctil, contagio entre parejas, entre otros problemas. Para más información, consulte los artículos relacionados sobre estas enfermedades y su vínculo con la periodontitis en nuestra web.

Síntomas de periodontitis.

  • Encías rojas, hinchadas o sensibles.
  • Encías que sangran solas o al cepillarse.
  • Dientes que se han movido o aflojado.
  • Dolor en dientes sin caries.
  • Sensación "roedora" o de picor en las encías.
  • Pus entre los dientes y las encías.
  • Mal aliento persistente.
  • Dientes largos y encías retraídas.
  • Encías que se han separado del diente.
  • Hipersensibilidad de los dientes al frío y calor.
  • Cambios en la manera en que los dientes encajan en la mordida.
  • Cambios en la forma en que se ajustan las dentaduras parciales.