Odontalgia: Causas del dolor dental, síntomas y tratamiento.
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¡Ay! ¡Cómo me duele! ¿Qué puedo hacer? |
¿Qué tipos de dolor pueden confundirse con el dolor dental (odontalgia)?
El dolor dental puede ser causado por diversas afecciones. El más intenso suele ser la pulpitis supurada debido a caries. Sin embargo, también puede originarse por problemas periodontal, como abscesos o gingivitis, y disfunciones de la ATM o sinusitis maxilar. En raros casos, el dolor se debe a neuralgias de nervios craneales o infecciones virales como herpes simple o zóster.
El dolor dental proviene de la pulpa, donde se encuentran los receptores sensitivos. La pulpa reacciona y se adapta a los estímulos, y su salud es crucial para la dentina. Estímulos sobre la dentina también pueden generar dolor pulpar, ya que muchos consideran que la dentina forma parte de la pulpa, aunque calcificada.
¿Es posible identificar con precisión qué diente causa el dolor?
Aunque en la mayoría de los casos es posible identificar con precisión el diente cariado que causa el dolor, esto puede resultar difícil en algunas situaciones. Uno de los aspectos más característicos del dolor causado por la inflamación de la pulpa es que no siempre se puede determinar exactamente qué diente está afectado, ya que la pulpa no posee un tipo específico de receptor sensorial.
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| Dibujo tridimensional de una pulpa inflamada. |
El dolor es la única respuesta que la pulpa tiene ante estímulos irritantes, ya sean físicos, biológicos, térmicos o químicos. Esta parte del diente está expuesta a diversas agresiones, siendo las más frecuentes las infecciones bacterianas, los estímulos térmicos y químicos, y los traumatismos. Los efectos de estas agresiones suelen acumularse con el tiempo, lo que puede llevar a la inflamación pulpar (pulpitis).
En el dibujo, la pulpa se presenta en color rojo ladrillo, y se puede observar cómo, al estar compuesta por un conjunto de vasos sanguíneos y nervios, ocupa una parte significativa de la anatomía dental. Cuando la pulpa se inflama, no puede expandirse dentro de su espacio rígido, lo que provoca una fuerte irritación en los nervios sensitivos.
La pulpa no tiene receptores específicos para localizar el dolor (solo tiene receptores para detectar el dolor, pero no los propioceptivos), lo que hace que el dolor se sienta irradiado a lo largo del territorio del nervio sensitivo, y no necesariamente en el diente exacto que lo causa.
Además, la percepción del dolor está influenciada por factores como el estrés, las emociones, las experiencias pasadas y los estados cognitivos del paciente. Esto significa que la forma en que cada persona interpreta y siente el dolor puede variar. Las circunstancias y el estrés en el momento de la crisis dolorosa pueden modificar la localización e identificación del diente afectado.
Para complicar aún más el asunto, el umbral de dolor varía entre las personas. No todos experimentamos el dolor de la misma manera, ya que cada uno tiene un umbral de dolor único. —"Por ejemplo, yo soy de los que se quejan más porque siento el dolor más intensamente que otros. Por eso, como dentista, entiendo cuando mis pacientes dicen que a ellos les duele más que a nadie, porque a mí me pasa lo mismo.
¿Cuáles son las formas principales de sentir el dolor dental y qué hacer en cada caso?
1. Dolor en la dentina.
Se caracteriza por un dolor intenso y breve, que dura solo unos segundos, y que suele ser provocado por alimentos ácidos (como limones y naranjas), dulces y, sobre todo, bebidas frías.
Este tipo de dolor a menudo es difícil de localizar; el paciente no puede identificar cuál diente está causando el malestar, ya que el dolor se irradia a una zona y no se asocia con un diente específico. En la mayoría de los casos, la causa de este dolor es la caries. También puede ser provocado por una restauración en mal estado, la pérdida de un empaste o abrasiones en el esmalte. El tratamiento consiste en eliminar la caries, y en los casos de hipersensibilidad dental, se aplican fluoruros tópicos, que son muy efectivos y, al cabo de unos días, suelen atenuar o eliminar las sensaciones dolorosas.
2. Dolor después de un tratamiento dental.
Muchas veces, estas molestias son transitorias y desaparecen después de 3 o 4 semanas. ¿Qué sucede? En algunos casos, la pulpa se irrita por la proximidad de la caries o durante el fresado, debido a los estímulos biomecánicos del corte de la dentina con la fresa de alta velocidad. También puede ocurrir que, para limpiar la caries, se debe acercarse a la pulpa, lo que a veces genera pequeñas heridas pulpares imperceptibles.
Aunque los dentistas usamos materiales intermedios para proteger o estimular la formación de dentina, no siempre se logra el objetivo, ya que el estímulo puede ser mayor que la capacidad de adaptación de la pulpa. Esto provoca una reacción aguda y da lugar a la temida pulpitis. En esos casos, la única solución para obtener alivio inmediato es la extracción de la pulpa a través de un tratamiento de conductos (endodoncia).
3. Dolor pulpar agudo (“dolor de muelas”).
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| Dentista reflexionando sobre la causa del dolor de su paciente. |
El dolor puede variar desde leve hasta insoportable, y puede aparecer de manera espontánea, sin estímulos externos, o en respuesta a estímulos térmicos o químicos. Este dolor puede ser intermitente y pulsátil, con períodos sin dolor, o continuo, lo que le da una gran variabilidad. Cuando se presenta dolor bucal, el odontólogo generalmente comienza descartando que se trate de dolor relacionado con la pulpa dental.
El dolor pulpar puede surgir de manera espontánea, como un pinchazo breve e intenso frente a diversos estímulos. Suele intensificarse con el frío o el calor, aunque no sigue un patrón fijo. Puede ser momentáneo o constante. A menudo aumenta al acostarse, ya que la circulación sanguínea en la cabeza mejora y llega más sangre a la pulpa, lo que aumenta el edema inflamatorio y la presión intrapulpar, intensificando el dolor.
Con el tratamiento adecuado, como la extracción de la pulpa (endodoncia), el dolor desaparece rápidamente. Si no se realiza este tratamiento, el dolor persistirá hasta que la pulpa muera gradualmente, lo que lleva a su necrosis e infección (gangrena pulpar). En esta etapa, el dolor es menos intenso, pero cambia de carácter, ya que se debe a la propagación de la infección hacia el ligamento y el hueso del alvéolo.
Si ahora estás experimentando dolor, ve rápidamente al dentista para que elimine el paquete vasculonervioso y te alivie rapidamente. Después de este tratamiento, recordarás a tu dentista con gratitud, y es posible que pienses que tiene la capacidad de hacer milagros, ya que el alivio es casi instantáneo. Los dentistas estamos acostumbrados a escuchar, tras el alivio inmediato que causa la extracción de la pulpa, el comentario agradecido del paciente que, en tono sentencioso, nos dice: "¡Tienes manos de santo!"
4. Dolor mixto (que afecta diente, periodonto y hueso adyacente).
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Paciente con un absceso dento alveolar agudo. |
La infección generalmente comienza en el conducto pulpar, pero si no se trata a tiempo, puede extenderse a los tejidos circundantes, afectando primero al ligamento periodontal.
El dolor asociado con esta infección es intenso y constante, empeorando al masticar, presionar o al percutir el diente afectado. Esto sucede cuando la infección de la pulpa se difunde hacia los tejidos cercanos, causando inflamación y la formación de un absceso (una infección localizada con pus). En casos más graves, puede desarrollarse un flemón dental, una inflamación difusa que afecta los tejidos blandos de la cara y el cuello, y puede ir acompañada de linfadenitis regional, fiebre y alteraciones en el estado general del paciente.
El tratamiento de esta afección incluye la endodoncia (tratamiento de conductos) y, en muchos casos, la administración de antibióticos. Si la pieza dental está severamente dañada, es necesario extraerla una vez que el paciente haya iniciado el tratamiento antibiótico. Si la pieza aún es reparable, se drena el absceso y se realiza la endodoncia. En los casos de flemón difuso, puede ser necesario un tratamiento hospitalario.
Las personas con trastornos o enfermedades que comprometen su sistema inmunológico deben tener un cuidado especial, ya que en estos pacientes las infecciones pueden ser más graves y difíciles de controlar. También aquellos con diabetes o que están bajo tratamiento inmunosupresor, como los trasplantados, tienen un mayor riesgo de desarrollar complicaciones sépticas. En estos casos, es esencial un control riguroso de la salud bucal para implementar la mejor estrategia preventiva: la prevención.
Otros tipos de dolor confundibles con dolor pulpo dental.
La sinusitis es la inflamación de las cavidades naturales que rodean las fosas nasales. Dependiendo de la zona afectada, se puede hablar de sinusitis frontal, maxilar, entre otras. En algunas ocasiones, un dolor que parece originarse en un diente o en sus cercanías puede, en realidad, tener su origen en otra área cercana o incluso más distante, como es el caso de las disfunciones temporomandibulares o las otitis.
Existen diversas condiciones que pueden causar dolor similar al de problemas dentales. Por ello, es recomendable consultar con otros especialistas para determinar con precisión el origen de las molestias y descartar causas no dentales cuando no se puede identificar claramente si se trata de una odontalgia.