Blanqueamiento Dental: Qué Esperar, Duración y Límites del Tratamiento.

Blanqueamiento dental: Descubre la verdad sobre este procedimiento. Conoce el alcance y limitaciones del mismo.

Blanqueamiento dental profesional alógeno.

Entre las actuales tendencias estéticas están los blanqueamientos dentales y anales. Los dientes y el ano, bien blanquitos, son parte de los cánones de belleza corporal contemporáneos. Qué tienen los extremos del tracto digestivo para que muchas personas se obsesionen por tenerlos bien blancos es algo que no puedo responder. Pudiera ser una conducta enmarcada dentro de los trastornos dismórficos corporales. Para justificar y promover los blanqueamientos dentales está la parafernalia propagandística de las hermosas sonrisas, símbolos de alegría y limpieza que se obtendrán con ellos; hasta al más feo le sale novia/o después de un blanqueamiento dental. Solo el hombre sonríe, ningún animal lo hace (RAE: hombre. Ser animado racional, varón o mujer)

A propósito de las sonrisas y los dientes blancos.

Posiblemente, la sonrisa que ha atraído más atención a lo largo de la historia es la de la Mona Lisa. De hecho, el significado de "Gioconda" en castellano es "la alegre". Sin embargo, a mí me parece que la dama no era tan alegre como nos la pintan. Existen testimonios que afirman que, mientras la pintaban, un grupo de músicos tocaba durante las largas horas de trabajo de Leonardo. A pesar de ello, ella no mostraba ni un atisbo de dientes, solo una ligera sonrisa sutil y discreta, acompañada de una mirada dirigida hacia la izquierda, con un efecto óptico único que hace que su expresión parezca desaparecer cuando el observador intenta detallarla.

La técnica de difuminado que Leonardo Da Vinci utilizó en la boca de la Mona Lisa, el "sfumato", crea en la pintura la ilusión de que la figura está sonriendo o luciendo triste, dependiendo de la perspectiva desde la que se observe. Pasé todo el tiempo que pude frente a ella, intentando ver si al menos se asomaba un borde de sus incisivos. Al final, casi me echan del Louvre y no vi nada parecido. Me pregunto si tenía los dientes muy feos, sucios, o si, simplemente, en aquella época no existían clínicas dentales que le habrían dado una sonrisa perfecta, con todos los dientes al descubierto.

La copia del Prado.

Mona Lisa Verdadera

Para concluir con doña Mona hace cuatro años el Museo del Prado, después de exhaustivos estudios anunció que la pintura que tenían desde 1819 considerada una copia poco notable de la Mona Lisa, fue pintada al mismo tiempo que el original por un estudiante que duplicaba la de Leonardo al mismo tiempo que este pintaba la original. Estupendo eso de tener en España nuestra "Gioconda".

La foto de la derecha es la verdadera, la izquierda, algo más clara, es la copia del Prado, esta tiene cejas, la otra la de Leonardo carece de ellas). A mí me gusta más la nuestra con sus cejitas, está más guapa, aunque sea una réplica. 

Como vemos Mona Lisa no ha necesitado ni mostrar los dientes para tener la sonrisa más famosa de la historia durante varios siglos. Con esta señora tienen pocas posibilidades las clínicas dentales, que nos aturden con sus estereotipos propagandísticos de mostrar dientes blancos como parte de una sonrisa encantadora y mandarte de cabeza a los costosos blanqueamientos dentales.

Espendo diente para un blanqueamiento

dental.

El color de los dientes está determinado genéticamente y, al igual que otras maravillas de la naturaleza, varía en una amplia gama de matices (más de treinta). Con el paso de los años, la dentina se vuelve más densa, lo que hace que el diente adquiera un tono más amarillento.

El color dental se genera por el efecto de la luz sobre elementos orgánicos denominados cromoesferas. La tonalidad percibida es el resultado de la combinación de la coloración interna de los tejidos dentales (esmalte y dentina) con los pigmentos exógenos que se acumulan en su superficie, generalmente debido a los hábitos personales. El color intrínseco de los dientes está condicionado genéticamente.

El color extrínseco, por su parte, proviene de la combinación o superposición de pigmentos añadidos sobre la superficie del esmalte. Entre estos pigmentos se encuentran sustancias como el té, el vino, el tabaco, la clorhexidina, las sales de hierro, el curry, los frutos secos, entre otros.

La sonrisa es un aspecto muy valorado por las personas, y los dientes juegan un papel fundamental en ella. Una investigación realizada por la Academia Americana de Odontología Cosmética (AACD) reveló que más del 92 % de los adultos estadounidenses consideran que una sonrisa atractiva es un recurso social importante.

Maravillosa sonrisa | boca cerrada y
sin dientes.

El valor psicológico de la sonrisa y los dientesEl valor psicológico de la sonrisa y su vínculo con los dientes ha sido aprovechado por las propagandas de dentífricos y clínicas dentales, especialmente las franquiciadas. 

Estas suelen asociar la "radiante sonrisa" con el blanqueamiento o tratamientos dentales, sugiriendo que una sonrisa perfecta depende únicamente de los dientes. Sin embargo, la sonrisa, en términos psicológicos, es algo más que simplemente mostrar los dientes. Existen sonrisas genuinas y fantásticas que no incluyen dientes, lo que demuestra que el valor de una sonrisa está más relacionado con la expresión emocional y la autenticidad 

Otra sonrisa que no necesita los dientes.

No hay nada más bello que las primeras sonrisas de los bebés con o sin dientes. Este boom informativo ha condicionado que se genere en la población el estereotipo que dientes blancos es sinónimo de salud oral. Así son las cosas, dientes blancos y alineados establecen la belleza de una persona, y hasta el estatus económico y por supuesto señalan su buena higiene.

Esto puede provocar conductas patológicas en muchos, casos tener los dientes blancos más que una alternativa estética altamente deseada se convierte en una obsesión (trastorno dismórfico corporal) para muchas personas, que paradójicamente se cepillan escasamente los dientes. 

Tipos de blanqueamientos dentales.

Cuando hablamos de blanqueamiento dental nos referimos a más de un procedimiento. Se pueden agrupar en los que se realizan en el hogar y por los dentistas.

En los últimos tiempos se han sumado también los que llevan a cabo los llamados centros de estética corporal. Estos últimos no sé dónde ubicarlos, pues evidentemente los esteticistas pueden embellecer a cualquiera, menos a los dientes, dentro de otras razones porque no están autorizados a realizar tratamientos odontológicos,  aun así, por

ignorar los riesgos del blanqueamiento dental hay quienes ponen sus dientes en sus manos pensando que es un procedimiento sin riesgo. Posiblemente el riesgo mayor está en la aplicación de productos de dudosa calidad muchas veces comprados a través de portales web, los cuales no están bajo la supervisión y control de las autoridades sanitarias.

¿Por qué los tratamientos influyen en el color de los dientes?

El color de los dientes está determinado por sustancias orgánicas presentes en su estructura, que contienen enlaces químicos no saturados. Estos enlaces, cuando se exponen a altas concentraciones de oxígeno, pueden ser atacados o romperse, lo que da lugar a una alteración en la superficie del esmalte que provoca el aclarado o la decoloración de los dientes.

El proceso de blanqueamiento dental se puede realizar a través de dos enfoques principales. El primero implica el uso de agentes químicos que contienen peróxidos, los cuales penetran en los tejidos dentales y actúan sobre los pigmentos intrínsecos, que se encuentran profundamente incrustados en el diente. Estos agentes provocan una oxidación que descompone los pigmentos, transformándolos en compuestos más simples como dióxido de carbono y agua, lo que resulta en dientes visiblemente más blancos.

El segundo enfoque se centra en la eliminación de manchas extrínsecas, que son las que se forman en la superficie del esmalte debido al consumo de alimentos y bebidas como tabaco, café, vino, frutos secos, refrescos de cola, entre otros. Estas manchas pueden eliminarse de manera efectiva mediante técnicas de instrumentación profesional, que incluyen la profilaxis dental y el uso de herramientas especializadas para pulir y limpiar la superficie dental.

En los tratamientos de blanqueamiento realizados por profesionales, generalmente se comienza con la eliminación de las manchas superficiales, empleando métodos mecánicos como el ultrasonido o el raspado. Una vez que las manchas externas han sido removidas, se procede a la aplicación de los agentes blanqueadores, que penetran más profundamente en los dientes, asegurando resultados más duraderos y efectivos, con un mayor control sobre la intensidad del blanqueo.

¿Cómo actúan los blanqueadores que contienen peróxidos?

Los peróxidos modifican el color de los dientes mediante una reacción química de oxidación. Cuando el esmalte se somete a esta reacción se fragmentan moléculas al romperse los enlaces químicos, dando lugar a sustancias químicas intermedias que son de un color más claro.

Este proceso tiene que realizarse en un período de tiempo suficiente para que se lleve a cabo la transformación química de los pigmentos orgánicos en dióxido de carbono y agua.

Como cualquier reacción química depende de la temperatura, el tiempo y claro está de la concentración del peróxido empleado como desencadenante. Así, a mayor temperatura, mayor tiempo de aplicación, y mayor concentración del peróxido, mayor será la oxidación y por ende el efecto blanqueador, y por supuesto el ataque químico a la superficie dental que provocará el blanqueo.

Todas las técnicas de blanqueamiento operan bajo estos principios. En unas se estimula la reacción mediante luz, y en otras se deja actuar el agente durante más tiempo como ocurre cuando se coloca en el producto químico en las férulas de uso nocturno. El agente químico más empleado en la consulta dental es el peróxido de carbamida al 10 % el cual produce aproximadamente 3,5 % de peróxido de hidrógeno.

Tanto los productos blanqueadores de uso profesional como los de uso doméstico han sido aceptados por la ADA (American Dental Association). Los productos de esta categoría que actualmente llevan el certificado ADA contienen una concentración igual o menor al 10 % de peróxido de carbamida. Hay muchas opciones de productos de blanqueamiento, los más populares son los geles que se colocan en cubetas estándar o personalizadas, materiales de aplicación tópica, tiras de blanqueo, etc. El nivel y tipo de ingredientes activos, la forma del producto y el método de aplicación puede variar ampliamente.

¿Cuáles son los posibles efectos secundarios del blanqueamiento dental en los dientes?

Los efectos secundarios más comunes asociados con los agentes blanqueadores a base de peróxidos incluyen la sensibilidad dental y la irritación ocasional de los tejidos blandos de la boca, especialmente las encías. Otros posibles efectos son el aumento de la fragilidad dental y la aparición de erosiones, particularmente en la zona de los cuellos dentales.

La hipersensibilidad dental suele presentarse durante las primeras etapas del tratamiento. La irritación o daño de los tejidos orales, especialmente en las encías, puede ser el resultado de una colocación incorrecta de la protección mucosa, que se utiliza para limitar el contacto del producto blanqueador con los tejidos blandos, especialmente en tratamientos que se activan con luz. Tanto la sensibilidad dental como la irritación de los tejidos blandos son generalmente temporales y tienden a desaparecer con el tiempo, aunque en algunos casos se han reportado daños irreversibles en los dientes y reacciones alérgicas graves en las mucosas.

Es importante que quienes deseen blanquear sus dientes estén al tanto de que no existe suficiente evidencia para respaldar el uso prolongado o repetido de productos blanqueadores sin supervisión profesional. El blanqueamiento dental debe ser supervisado por un experto que controle el riesgo a medio plazo sobre la integridad del esmalte dental. Además, es fundamental tener en cuenta que las obturaciones, coronas y fundas dentales no cambiarán de color, lo que puede resultar en diferencias de tonalidad no deseadas, ya que el blanqueamiento solo afecta a los dientes naturales, actuando exclusivamente sobre los tejidos dentales.

¿En qué se diferencia el blanqueamiento dental profesional del casero?

El tratamiento de blanqueamiento dental realizado por profesionales generalmente emplea un agente blanqueador que se activa mediante una lámpara especial que emite luz ultravioleta o láser. Este enfoque permite una acción más rápida y eficaz, ya que la luz potencia la reacción del peróxido, logrando resultados más inmediatos y duraderos.

Blaqueamiento dental activado por luz.

Por otro lado, los kits caseros para blanquear los dientes suelen contener un agente blanqueador que se aplica sobre los dientes mediante un molde o férula, que en los mejores casos puede ser personalizada para adaptarse de manera más precisa a la forma de la dentadura. Sin embargo, los productos blanqueadores utilizados en estos kits generalmente tienen una concentración más baja de peróxido en comparación con los que se emplean en las clínicas dentales, lo que resulta en un proceso más lento y menos intenso.

¿Cuándo está contraindicado el blanqueamiento dental?

El blanqueamiento dental no debe realizarse antes de los 16 años, ya que la cámara pulpar es aún demasiado amplia, lo que puede permitir que el agente químico irrite los nervios, causando hipersensibilidad o daño irreversible.

Las personas con dientes y encías sensibles deben evitar el blanqueamiento, ya que puede empeorar los síntomas. Asimismo, aquellos alérgicos al peróxido deben abstenerse de usar productos blanqueadores.

Los individuos con gingivitis, periodontitis o esmalte dental desgastado tampoco deben someterse al tratamiento, ya que los agentes blanqueadores pueden irritar aún más los tejidos. Las caries deben ser tratadas antes de realizar cualquier blanqueamiento, ya que los agentes químicos penetran en las zonas dañadas, provocando dolor o hipersensibilidad. Es importante destacar que los dientes de los jóvenes son más permeables que los de los adultos, lo que aumenta el riesgo de daño en su estructura biológica.

El efecto secundario más común es la hipersensibilidad dental, que suele aparecer en los días posteriores al blanqueamiento. La irritación de los tejidos blandos, especialmente las encías, es inmediata y a menudo se debe a alergias a los agentes químicos o a un mal ajuste de la boquilla, así como a una colocación incorrecta de los geles de protección gingival. Estas lesiones suelen sanar en pocos días sin mayores complicaciones, pero en algunos casos pueden causar daños considerables en las encías, impidiendo que se cepillen los dientes o que consuman alimentos ácidos durante varias semanas.

¿Cuál es la duración y la previsibilidad de los resultados del blanqueamiento dental?

Las expectativas de muchas personas respecto al blanqueamiento dental a menudo se ven frustradas, ya que los resultados no siempre son los esperados. Además, se han asumido los costos y, en algunos casos, incluso se han sufrido daños. En particular, los fumadores deben ser conscientes de que los resultados serán limitados, a menos que dejen de fumar.

Los dientes amarillentos responden bien al blanqueamiento, mientras que los tonos marrones suelen mejorar poco y los dientes de color gris oscuro rara vez muestran cambios. En cuanto a los resultados estéticos, estos no son completamente predecibles. En algunos casos, puede producirse un "hiperblanqueamiento" que carece de atractivo estético, mientras que otras personas apenas notan diferencias.

El blanqueamiento dental no tiene una duración indefinida; sus efectos son temporales. Esto significa que, con el tiempo, será necesario repetir el tratamiento para mantener el color obtenido inicialmente. Este proceso puede dar lugar a un ciclo repetitivo, en el cual, si se desea mantener los dientes blancos, se deberá recurrir constantemente a los agentes blanqueadores, los cuales, a largo plazo, pueden dañar las estructuras dentales.

¿Quiénes tienen la formación y la autorización para realizar blanqueamientos dentales?

La respuesta a esta pregunta parece sencilla: aquellos que cuenten con la formación adecuada y la acreditación profesional, tanto colegial como médico-legal, son los encargados de realizar los blanqueamientos dentales, y estos son, por supuesto, los odontólogos. Sin embargo, lamentablemente, en algunos centros dedicados a la estética, personas sin la capacitación necesaria en salud dental realizan estos procedimientos. El problema radica en que muchos de estos lugares, ya sea por desconocimiento o por la simple intención de comercializar la salud, terminan trivializando el cuidado bucal.

Optar por dientes blancos a costa de una erosión dental o de daños en las encías es el riesgo que se corre cuando un tratamiento de blanqueamiento es realizado por individuos sin la debida cualificación en salud bucodental. En algunos países, como Francia, el blanqueamiento dental es considerado un acto médico regulado dentro de la Clasificación Común de los Actos Médicos (CCAM), y solo puede ser llevado a cabo por dentistas o bajo su supervisión, por higienistas dentales debidamente titulados.